jueves, 10 de marzo de 2011

Peeeeeeeeeepe!

El tono, el timbre, todo. Era la voz de mi abuela desde una jaula, y también la de mi abuelo. Pobre, los loros, los animales en general, siempre me dan mucha pena fuera de su hábitat. Este era un loro gris africano, o yaco. Los que mejor reproducen la voz humana. En Mauritania tienen la costumbre de regalarlos a los pescadores que trabajan esos mares. Es un agasajo que, aunque sepas que no puedes aceptar, nunca debes rechazar. Se trataría de una falta de respeto.


La cuestión es que uno de esos loros, ojito derecho de mi abuelo y mimado por mi abuela a pesar de quejarse siempre de las cáscaras de pipas, acabó en una pequeña aldea de Galicia. En la mía. Y era muy listo, "como un allo". De carácter caprichoso, incluso diría que alocado, a veces se dejaba acariciar en el lomo, levantándole un poco el plumaje. Te lo agradecía con suaves caricias de esa lengua tan áspera y seca. Otras veces, sin embargo, era el bicho más arisco del mundo y cuidado con que te pillase un dedo, pues menuda fuerza tenía en el pico.

Si algo hay que siempre me ha conmovido de este loro han sido sus palabras. Además de los juramentos en arameo con jeada de mi querido abuelo él siempre decía "Hola Cariño" o "Pepe Borracho".



Cuando conocí la monogamia de los loros me quedé fascinada. Muchos de esos loros que se embarcan mueren, pero no por las condiciones en las que navegan, ni por el frío, ni por la comida (que también). Se mueren de tristeza. De tristeza porque han sido separados de la pareja con la que iban a compartir el resto de su vida de loros.

Mi abuelo, tras unos años de diálogos bastante divertidos (entre otras historias que darían para unos cuantos libros), dejó de estar con nosotros. Y el loro, durante unos días llamaba a mi abuela con la voz exacta de Pepe, O Torreiro como le llamaban. Pero lo cierto es que, al poco, el loro también murió como lo había hecho su compañero de mañanas y de tardes. Ese compañero que siempre le hablaba, le acompañaba y que tenía en los ojos la chispa de toda una vida.

Un poco de mí partió también con ellos dos.

jueves, 3 de marzo de 2011

No creo que todos hayamos bailado un último Tango en París

Y menos con Marlon Brando. Aunque sea un Marlon Brando desagradable y un tanto asqueroso. Las oportunidades pasan, a veces nos abrazamos a ellas. Otras, nos aferramos desesperadamente creyendo que es lo mejor.
Pero otras las rechazamos. Y nos arrepentimos.
Nunca he sabido desperdiciar una oportunidad. O eso es lo que los posos me dicen. Pero, de todas formas, esta frase no puede ser cierta en ningún caso. Cada decisión trae ligada una negación de una oportunidad. En la más nimia intersección decidimos. Y somos lo que decidimos.
Ellos decidieron perder los nombres en un piso de techos altos. Una película categorizada de X en su tiempo, bastante subida de tono, pero que tiene muchas lecturas. Sensibilidad e interpretación.

Hay gente que aunque quiera, no sabe amar.



Y me quedo con una escena, en el baño. Ella confiesa estar enamorada y el le dice:

- I'm in loooove! I'm in love you understand?

(…)

-  You want this man you love to protect and take care of you.

- Yeah.

- You want this golden, shining, powerful warrior to build you a fortress where you can hide in. So you don't have to ever… You don't ever have to be afraid. Or you don't have to feel lonely or you never have to feel empty. That's what you want, isn't it?

- Yes.

- Well, you'll never find it.

- But I find this man.

- Well, then it won't be long until he'll want you to build a fortress for him out of your tits and out of your cunt and out of your hair and out of your smile and the way you smell. And… any and some place where he can feel comfortable enough and secure enough so that he can worship in front of the altar of his own prick.

- But I find this man!

- No, you're alone. You are all alone. You won't be able to be free of that feeling of being alone until you look to death right in the face. I mean, that sounds like bullshit, some romantic crap, until you go right up into the ass of death. Right up into the ass…
And then, maybe, maybe, you'll get to find him.


Maybe, maybe


http://www.youtube.com/watch?v=2U7rU2I1f34